La duración del mantenimiento del crédito a las pymes ha sido uno de los asuntos más delicados en el largo análisis de la opa del BBVA al Sabadell: el vallesano cifró en 21.500 millones de euros la reducción de crédito nuevo a estas empresas tras la operación. En su diálogo con la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), el banco vasco llegó a plantear hasta seis propuestas de compromisos y, finalmente, prometió mantener el circulante a las pymes clientes de Sabadell, así como el volumen del crédito a aquellas que dependan de forma significativa para su financiación de ambas entidades o de una de ellas. Todo esto durante tres años, prorrogables a otros dos adicionales. Un plazo de tiempo que se queda muy lejos de la petición que hizo el banco opado: Sabadell había puesto sobre la mesa una duración de este compromiso de ocho años, algo que Competencia vio inviable, al considerarla una "propuesta desmedida".